Rusia prepara el asalto final a Kiev y advierte por un «baño de sangre»
En el sexto día de la invasión de Ucrania, Vladimir Putin exigió el reconocimiento de Crimea y la desmilitarización para terminar con la guerra. Ante sus pedidos, Joe Biden realizó una reunión de urgencia con líderes europeos y miembros del G7 para reforzar la unidad. Pese a las sanciones y las negociaciones, las tropas rusas continuaron su avance hacia Kiev.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, firmó la petición de ingreso para que Ucrania sea parte de la Unión Europea. Mientras, la ONU realiza una reunión de urgencia en la que decidirán si condenan a su par ruso.
En las negociaciones en Bielorrusia, Ucrania exigió un alto al fuego «inmediato» y la retirada de las tropas rusas. Mientras que la administración de Vladimir Putin aumentó la tensión: aseguró que domina todo el espacio aéreo de Ucrania y puso en alerta a las fuerzas de disuasión nuclear.
En tanto el ejército ruso atacará las infraestructuras de los servicios de seguridad ucranianos en Kiev e instó este martes a evacuar a los civiles que viven cerca.
«Para detener los ataques informáticos contra Rusia, se llevarán a cabo ataques con armas de alta precisión contra infraestructuras tecnológicas del SBU (servicio de seguridad) y del centro principal de la unidad de operaciones psicológica de Kiev. Instamos a los habitantes de Kiev que viven cerca de los centros de retransmisiones a abandonar su domicilio», dijo el vocero del ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov.
