En noviembre, una familia necesitó $146.000 para no ser pobre
Una familia tipo de cuatro personas necesitó en noviembre contar con un ingreso de casi $146.000 para no caer bajo la línea de la pobreza, informó este martes el Indec.
La Canasta Básica Total (CBT) tuvo en noviembre un aumento de 4,4%, por debajo de la inflación general de ese mes, que fue de 4,9 por ciento.
En detalle, el informe oficial indicó que un hogar compuesto por dos adultos y dos menores en edad escolar precisó $145.948 en noviembre para no ser considerados pobres.
Asimismo, en el mismo mes la canasta alimentaria tuvo una suba de 3,1%, lo que implicó que una familia de las mismas características necesitó $64.012 para no caer bajo la indigencia.
INDICADORES PARA MEDIR LA POBRE Y LA INDIGENCIA
Vale recordar la CBT y la CBA son decisivos para medir el impacto de la crisis económica en los indicadores sociales. Eso sucede porque la canasta básica –que además de alimentos incluye otros ítems del gasto como indumentaria, salud, transporte o educación– determina la denominada “línea de pobreza”. Es decir, los hogares con ingresos menores a la CBT son los que pasan a ser considerados pobres.
En tanto, la canasta alimentaria –que tiene un alcance limitado a bienes de primera necesidad– es la que configura la “línea de la indigencia”: aquellas familias que no lleguen a cubrir los ingresos necesarios para adquirir la CBA son indigentes.
EL COSTO DE LA CANASTA EN DISTINTOS FORMATOS DE FAMILIA
Por otra parte, el informe de la Canasta Básica de Indec también considera otros formatos de hogares para medir cuánto ingreso mensual necesitaron en ese mes.
Así, una familia compuesta por una mujer adulta, una mujer adulta mayor y un joven de 18 años necesitó $116.192 para evitar caer en la pobreza, o $50.961 para no caer en la indigencia.
Por su lado, un hogar que está integrado por un varón y una mujer, ambos de 30 años, y tres hijos de 5, 3 y 1 año precisaron $153.505 para no caer bajo al línea de la pobreza y $67.327 para no ser indigentes.
Por último, también hay mediciones “individuales” de esta métrica. Un adulto requirió $20.715 para tener sus necesidades alimentarias satisfechas y $47.232 para la canasta básica total.