SANTA CRUZ: asesinan a un prefecto en un control y la Policía abatió al atacante
Un efectivo de la Prefectura Naval Argentina y un joven de 21 años murieron este sábado en un sangriento episodio registrado en un control de vehículos con motivo de la cuarentena por la pandemia de coronavirus en la localidad santacruceña de Puerto Deseado.
El prefecto baleado fue identificado como Ricardo «Richi» Soto, oriundo de la ciudad de Trelew que también había realizado sus estudios secundarios en la Colegio 721 «Caleta Horno» de la localidad de Camarones, antes de radicarse en Puerto Deseado como agente de la Prefectura Naval Argentina.
El hecho ocurrió alrededor de las 16:40, cuando agentes de esa fuerza se encontraban realizando un retén de tránsito. El cabo primero Soto cayó al suelo gravemente herido, mientras que el agresor, identificado como Pedro Espinoza, huyó del lugar a la carrera, antes de que los uniformados que acompañaban a la víctima pudieran detenerlo
Soto fue trasladado de inmediato al Hospital de Puerto Deseado, donde ingresó en grave estado a la sala de terapia intensiva y falleció a los pocos minutos a raíz de la herida de bala recibida.
En tanto, el agresor se dirigió hacia la estación de trenes de Puerto Deseado, desde donde realizó algunos disparos hacia los efectivos que lo perseguían, quienes repelieron la agresión, por lo que se originó un breve tiroteo.
Posteriormente, el joven ingresó a la casa de una familia pero fue sacado por los moradores de la vivienda, por lo que luego escapó hacia un gimnasio situado en la calle lateral del Juzgado de Instrucción local.
Espinoza se dirigió a una plaza, en donde tomó de rehén a una persona. Hasta allí llegaron efectivos de la Policía de Santa Cruz y prefectos vestidos de civil, por lo que lograron encerrarlo y el agresor soltó al rehén, para huir hacia otra plaza contigua.
En ese lugar comenzó a dispararles nuevamente a los agentes, hasta que se le trabó la pistola y volvió a arremeter contra los uniformados, pero en esas circunstancias los policías lograron balearlo y finalmente murió en el lugar.
Los efectivos secuestraron entre las pertenencias del delincuente un arma de fuego calibre 11.25 con 7 cartuchos, que será sometida a las pericias correspondientes, mientras los investigadores realizaban una inspección ocular desde el lugar donde fue asesinado el prefecto.