Una beba de un año fue internada en el Hospital Pediátrico de Resistencia tras ingerir cocaína de manera accidental en su casa. Fue llevada de urgencia por su abuela materna, quien la encontró jugando con un polvo blanco.
Los estudios toxicológicos confirmaron la presencia de la droga y la menor recibió tratamiento por un cuadro de intoxicación, quedando internada por resguardo judicial.
El hospital dio intervención a la Justicia y a los organismos de protección de la infancia para evaluar el entorno familiar, ya que en la vivienda convivían otros menores y un familiar con consumo problemático.
Tras estabilizarse y recibir el alta médica, la beba quedó al cuidado de su abuela materna, mientras el caso continúa bajo seguimiento de las autoridades.
