Mendoza: murió el parrillero de un restaurante y obligaron a los empleados a seguir trabajando junto al cuerpo
Walter Leandro Nuzzo, un parrillero del restaurante «La Cabrera» en el microcentro mendocino, murió de un infarto fulminante mientras trabajaba. A pesar de la tragedia, los empleados del local recibieron la orden de continuar atendiendo a los clientes, con el cuerpo de su compañero aún presente en el lugar. El hecho generó indignación y cuestionamientos hacia la decisión de los responsables del establecimiento.
Según testigos, el equipo médico que acudió al lugar intentó reanimarlo, pero las maniobras de resucitación cardiopulmonar no fueron suficientes para salvarle la vida. El restaurante quedó en shock.
El relato de testigos, recogido por medios locales, describe una escena desconcertante. A pesar del impacto emocional que significaba la pérdida de un compañero, los trabajadores, desde los parrilleros hasta el personal de salón, debieron seguir atendiendo a los clientes. El turno noche terminó a la 1 de la madrugada, momento en el que finalmente se retiró el cuerpo de Walter.
Tras lo ocurrido, el restaurante emitió un comunicado en sus redes sociales lamentando la pérdida de su colaborador y anunciando que permanecería cerrado «en señal de duelo» hasta el viernes a la noche.