Este lunes, el Tribunal Oral Federal de Resistencia dio a conocer los fundamentos de la condena contra Gerardo Ramos, sargento de la Policía del Chaco, a dos años de prisión en suspenso por falso testimonio agravado por haberse cometido en causa criminal y por falsedad ideológica. También condenaron a Luis Hermosa, un mecánico de la ciudad, con el que tenía comunicaciones el uniformado y que aportó un falso testimonio.
La causa inició por el presunto robo de motocicleta y elincreíble hallazgo de 44 kilos de cocaína , lo que luego derivó en un entramado de denuncias, allanamientos y acusaciones de intimidación.
Todo comenzó el 1 de agosto de 2022, cuando Luis Hermosa se presentó en la Comisaría Segunda para denunciar un robo que dijo haber presenciado el día anterior. Según su relato, alrededor de las 7:30 de la mañana del 31 de julio, observó cómo dos hombres, a bordo de una motocicleta azul, despojaban de su rodado y su celular a una mujer en una esquina del centro de la ciudad. El mecánico identificó a uno de los presuntos autores como «Gabi» Sánchez, mencionando que este residía en un edificio en Barranqueras y que tenía un local avícola.
A raíz de esta denuncia, el 29 de agosto de 2022, el personal policial allanó una vivienda en la ciudad de Barranqueras, propiedad presuntamente alquilada por Gabriel Sánchez. Durante el procedimiento, según el testimonio del oficial Gerardo Ramón Ramos, se encontraron paquetes de cocaína escondidos en el cielo raso del inmueble , lo cual activó la intervención de la división de narcóticos.
Sin embargo, la investigación dio un giro cuando Hermosa confesó, durante el juicio, que su testimonio inicial fue forzado. Según él, dos hombres, que se identificaron como gendarmes, lo visitaron en su domicilio y le ordenaron que implicara a Sánchez en el robo, bajo amenazas de perjudicar su libertad condicional en una causa previa de drogas. Afirmó haber cedido a la presión, temiendo que «le pusieran droga en su casa».
Durante las audiencias del juicio, la víctima del robo brindó una descripción detallada de los asaltantes y confirmó que fue despojada de su moto y teléfono celular en una fría mañana de invierno. Por su parte, el oficial que tomó la declaración inicial de Hermosa, declaró que no observó ninguna conducta anómala en el denunciante en ese momento, aunque no recordaba que hubiese sido acompañado a la comisaría por terceros.
En el transcurso de la investigación se confirmó que no hubo participación de Gendarmería Nacional en el caso, desmontando la versión de Hermosa sobre la supuesta presión de «gendarmes» para implicar a Sánchez.