El dirigente del Frente Patria Grande (FdT), Juan Grabois, afirmó esta noche que su sector está en condiciones «de ganar» en una eventual competencia interna del Frente de Todos (FdT) en las primarias abiertas simultáneas y obligatorias que se llevarán a cabo el próximo 13 de agosto, y llamó a dar «batalla contra la derecha rancia y neoliberal», al hablar en el lanzamiento de su precandidatura presidencial en un acto en el club Ferro.
“Nosotros, los hijos, las hijas de la generación diezmada vamos a tomar la posta. Junto a los nuevos descamisados y la juventud de Argentina vamos a tomar la posta”, indicó Grabois durante su discurso en el Estadio Etchart, al aludir a las palabras que ayer formuló la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner durante una entrevista.
Allí, ante más de 5.000 personas que se acercaron al estadio, el dirigente afirmó que “la persecución despiadada» hacia Cristina Fernández de Kirchner «nos obliga a tomar el bastón de mariscal”.
“Vamos a ganar las PASO y vamos a garantizar la más fuerte batalla contra la derecha rancia neoliberal”, recalcó.
El también dirigente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) y del Frente Patria Grande señaló que llevará adelante “una opción política y un programa de Gobierno verdaderamente transformador y revolucionario”.
“No hay excusas para esquivar la realidad histórica que nos toca. No hay más excusas para descansar en una sola persona para que resuelva los problemas del país. Nos lo pide ella (Cristina Fernández de Kirchner) , el pueblo y la patria”, recalcó y agregó que el lanzamiento de su precandiatura “no es un simulacro”.
Sin embargo, Grabois advirtió al interior del FdT que tiene “un proyecto de país” y que su espacio no aspira a obtener solamente «diputados y concejales”.
“O estamos colectivamente representados en la fórmula y en el programa de Gobierno o nos dan las PASO o vamos por afuera con nuestro partido”, subrayó el dirigente social.
Sobre el armado electoral de la coalición oficialista, Grabois reiteró sus críticas al ministro de Economía, Sergio Massa, a quien calificó de «un aliado» que «no forma parte de la familia» en la que sí ubicó a otros dirigentes del FdT como el ministro del Interior, Eduardo «Wado» De Pedro, el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el diputado nacional Máximo Kirchner.
“No tengo problemas con los aliados, pero no nos pidan que nos encuadremos sin luchar. Queremos levantar las banderas de soberanía, tierra, techo y trabajo como hizo Cristina (Fernández de Kirchner)”, expresó.
Y agregó: «El peronismo» debe ser «latinoamericanista, distribucionista y popular» y no puede estar ubicado «a la derecha» del arco político.
«El movimiento nacional debe dejar de estar secuestrado por administradores de la realidad, equilibristas del poder y neoliberales mal disfrazados», sostuvo.
Grabois también apuntó contra los seguidores del diputado de La Libertad Avanza (LLA) Javier Milei, a quien acusó de «robarse» la palabra «libertario».
«Libertarios eran los anarquistas (Simón) Radowitzky y Severino di Giviovani. Esos eran los verdaderos libertarios. Ahora, son los que sacan a los pibes de la droga, del encierro, de la calle, de la reincidencia. No los que están con Milei», remarcó.
En su discurso de casi dos horas, Grabois también presentó su programa de Gobierno y detalló cuatro ejes: «principios rectores, orden socioeconómico, orden político institucional y bloque soberano estratégico”.
“Nuestro proyecto político es para el 99%, porque hay un 1% que va a tener que ceder lo que le sobra para que otros tengan lo que le falta», disparó.
Además, indicó que hará una “reforma judicial” en la que hará “volar” a los cuatro jueces de la Corte Suprema.
También aseguró que en caso de llegar a la Presidencia cancelará el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Vamos a hacer el tercer plan quinquenal para una nueva Argentina”, subrayó.
También aseguró que hará una «reforma impositiva y agraria” en la que la tierra sea “para los que la trabajan” y no para «el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA)».
“Vamos a llevar la Capital Federal al Norte Grande para dejar de estar hacinados en cuatro centros urbanos”, resaltó sobre otros de sus proyectos.
En otro pasaje de su discurso hizo alusión a su participación de la movilización contra «el ajuste del FMI” en reclamo de soluciones al “problema alimentario» que realizaron el jueves pasado organizaciones sociales en el centro porteño.
“Fueron cientos de miles a la marcha. Están viviendo en un termo y no se dan cuenta de la profundidad de la crisis que vivimos”, indicó.
En ese sentido, el precandidato saludó al secretario de Economía Social y referente del Movimiento Evita, Emilio Pérsico, y al secretario general de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), Esteban “Gringo” Castro, con quienes fundó la CTEP en 2011 y que se encontraban en una de las gradas.
“Ese fue el núcleo original y creo que fue de lo mejor que hicimos hasta ahora. Después nos pusimos medio boludos. Creo que escribimos algún rengloncito de la clase obrera argentina con los compañeros de todas las organizaciones sociales”, aseguró.
También agradeció la presencia del secretario adjunto del sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, a quien le reconoció «solidaridad y acompañamiento» con los movimientos sociales.
“Es uno de los estigmatizados porque defiende a los que laburan. No sé si es la virgen, Pablo, pero defiende a los laburantes y está ahí”, señaló.
Pese a indicar que durante su gestión, el presidente Alberto Fernández «manejó bien» la pandemia, criticó al jefe de Estado por no generar una “retaguardia” para afrontar los «problemas económicos”.
“No podemos seguir endiosando el Producto Bruto Interno (PBI) como si fuera el motor verdadero. El año pasado crecimos un montón y también creció la pobreza y la desigualdad. No es por ahí”, deslizó.