22 noviembre, 2024
PolíticaResistencia

Martínez reconoció la demoras de la remodelación de la plaza 25 de Mayo por la inflación

El Intendente de Resistencia reconoció que la inflación generó demoras y problemas en la readecuación de costos para una obra planificada para un año y anticipó que a fines de enero ya estará en condiciones para los festejos del aniversario de la ciudad. Anticipó que el resultado será motivo de orgullo para los resistencianos.

Gustavo Martínez lamentó las demoras que se han suscitado en la finalización de las obras de restauración y mejoramiento integral de la Plaza 25 de Mayo de Resistencia. Igualmente, se mostró entusiasmado con el hecho de poder contar con la obra para el próximo mes de febrero; anticipando que los trabajos realizados valen la pena.

Al respecto el intendente detalló: «Tenemos mucho trabajo fino de restauración de todas las obras de arte y monumentos, los bancos intervenidos por artistas plásticos; va a ser un gran paseo de arte, se ampliaron los sanitarios, las áreas de juegos, se reconstruyó el anfiteatro, se cambiaron las pérgolas, se sanearon todos los árboles, se terminó la plantación de 108 árboles nuevos para que cada sector de la plaza tenga una floración de color distinta».

Con ese convencimiento, lamentó que haya «gente buscando generar tensión por las demoras» y explicó´: «No podemos estar contándolo todos los días y quizás sea nuestro error porque ese es el campo para que el malicioso esté todo el tiempo agudizando el malhumor social que existe y aumenta el enojo de los vecinos».

Al enumerar las razones por las que no se pudo avanzar en los tiempos establecidos, el Intendente señaló que «el principal problema fue haber diseñado una obra para ejecutarla en un año» porque se realiza el proyecto, el cómputo de materiales y el presupuesto. «Todo eso se hizo entre marzo y abril del 2021, se puso el precio y se llamó a licitación; se adjudicó la obra en el segundo semestre de ese año; se firmó contrato, se pagó el anticipo y se inició en diciembre de 2021. En enero de este año se cercó la plaza y la vamos a terminar en febrero de 2023 con precios de marzo de 2021», comentó.

En ese punto, explicó que «el Decreto Nacional que establece los saltos de actualización de precios tiene varios componentes que determinan una fórmula para el cálculo». El problema es que hay elementos que se manejan por precios internacionales que superan los datos inflacionarios que da el Indec y eso produce un desfase. «Le ampliamos las áreas de juegos y la cobertura de caucho antigolpes, pero eso está ligado al crudo, porque el caucho es una derivación del crudo, entonces el salto no lo podés medir con la misma fórmula; lo mismo pasa con el Arsénico que es el principal insumo para la siderúrgica y está ligado a valores internacionales como las commodities», enumeró.

Según su explicación, todas las readecuaciones presupuestarias «fueron por debajo del valor real y lógicamente se genera una tensión; más un proveedor de hormigón que nos viene demorando mucho en la entrega y eso genera una complejidad que te deja en la disyuntiva de licitar de nuevo o continuar hasta finalizar».

Finalmente, estimó que si no se hubiera vallado la plaza no habría tantas dudas porque la gente vería qué es lo que se está haciendo; pero insistió que eso se hizo para evitar que los materiales pudieran ser utilizados como elementos contundentes en algún conflicto social o piquete que se dan frecuentemente en esa zona.

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