Boca venció a Quilmes y es semifinalista de la Copa Argentina
En Mendoza, el Xeneize se impuso 3-2 al Cervecero y está entre los cuatro mejores del torneo. Enfrentará a Patronato, que eliminó a River. El partido estuvo detenido por incidentes de los hinchas de Quilmes.
Pero, muy rápido, Boca lo emparejó. En la primera que tuvo, “Pipa” Benedetto la mandó adentro y puso el 1-1, a los 7 minutos. Un inicio de partido con todo.
De todos modos, Quilmes no se amilanó. Si bien la pelota era mayor propiedad del Xeneize, el Cervecero buscaba sorprender de contra. A los 18, un pelotazo dejó a Batista ingresando al área y definió ante la salida de García. La pelota se fue muy cerquita del segundo palo.
A los 22, el que la tuvo clara fue Boca. Rolón quitó una gran pelota en la salida del rival y dejó solo a Morales, pero “El Toro” la desperdició. El zurdo probó con derecha un disparo cruzado, pero se fue afuera. Un minuto después, Oscar Romero probó con un tiro de larga distancia que obligó a una estirada del arquero para mandarla al córner.
A los 29, un córner para Quilmes generó que por el segundo palo apareciera Federico González y cabeceara, pero la pelota pegó en la rodilla de Javier García ye fue de nuevo al tiro de esquina. Un partido de ida y vuelta.
Pero Boca tuvo la eficacia que Quilmes no tuvo. A los 33 minutos, Sandez ganó por izquierda y dejó solo de cara al gol a Gonzalo Morales, que puso el 2-1.
Sobre el final del partido, Quilmes metió otra jugada profunda con González entrando al área, pero apareció García para tapar el mano a mano.
En el complemento, el partido mermó en el ritmo. Quilmes ya no se mostró con la misma predisposición de la primera parte y Boca empezó a sentirse más cómodo en el partido.
Por una molesta física, Benedetto salió en los primeros minutos de la segunda parte y entró en su lugar Luca Langoni. Y en la primera que tocó el pibe, a los 14 minutos, puso el 3-1 para el equipo de Hugo Ibarra.
Pero Quilmes fue. Un gran cambio de frente dejó a Ruiz Díaz por la derecha, quien lanzó un centro que no parecía complicar demasiado, pero apareció en escena el veterano Mariano Pavone la desvió y metió el descuento: 3-2 para Boca, a los 19.
Pero, de manera increíble, los hinchas de Quilmes comenzaron a generar incidentes en una de las cabeceras, lanzando piedras de los escombros que generaron al romper los escalones de la tribuna. Incluso, rompieron las rejas que dividían la popular con la platea e invadieron ese espacio. Fue a los 20 minutos, lo que generó que se detuviera el partido. El cotejo estuvo parado por 18 minutos.