La ministra de Industria, Comercio y Turismo española, María Reyes Maroto, anunció este viernes que España dejará de exigir el certificado de vacunación contra el coronavirus Covid-19 a los turistas que provengan de países que no pertenecen a la Unión Europea (UE).
“Va a ser cuestión de días para que eliminemos una restricción que podía estar desanimando a turistas fuera de la Unión Europeo a visitarnos”, dijo la ministra española y completó: “Vamos a dejar de exigir el certificado de vacunación para permitir que entren también con un test negativo”.
Si bien Maroto aún no definió a partir de qué fecha dejarán de exigir el certificado de vacunación, detalló que sucederá una vez que el gobierno español termine de definir el detalle de la resolución que habilitará el ingreso al país sin certificado de vacunación.
“Siempre con prudencia, el mundo nos ve como un destino seguro, más del 92% de la población española está vacunada”, destacó la funcionaria y definió que se trata de “una buena noticia”, tanto para los viajeros del mundo como para el sector turístico español, que estaba a la espera de este anuncio.
“El turismo se recupera a ritmos difíciles -subrayó- pero hoy es una realidad, el turismo es la palanca de crecimiento de la economía este año”.
De esta manera España busca reactivar la industria turística, una de las más importantes del país, luego de los casi dos años en que estuvo inmovilizada. Con esta medida más viajeros podrán ingresar al país tan sólo presentando un PCR negativo.
Hasta tanto entre en vigencia esta nueva resolución quienes viajen a España deberán presentar el certificado de vacunación. Por el momento España acepta certificados de las vacunas Pfizer-BionTech, Moderna, AstraZeneca, Johnson & Johnson, Novavax, Sinopharm, Sinovac y Covaxin, además de aceptar el ingreso de viajeros recuperados de la enfermedad de coronavirus en los 180 días previos al viaje.
Los argentinos vacunados con Sputnik-V pueden ingresar a España en tanto hayan recibido una tercera dosis de refuerzo de algún inoculante aprobado y autorizado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la EMA.