Covid-19: las muertes en el mundo descienden a niveles del comienzo de la pandemia
El número de muertes por coronavirus a nivel mundial cayó la semana pasada un 23% frente a la semana anterior, situándose en 32.959 y alcanzando los niveles más bajos desde marzo de 2020, informó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En concreto, las cifras de fallecidos en todo el mundo son similares a las de la última semana de marzo de 2020, cuando la mayoría de los países ya se encontraban en confinamiento domiciliario y llegaron los peores momentos de la pandemia, sostuvo la agencia sanitaria en su actualización epidemiológica semanal publicada ayer.
De acuerdo con el informe, sin embargo, tras un descenso constante desde finales de enero de 2022, el número de nuevos casos semanales aumentó por segunda semana consecutiva, con un incremento del 7% en los pasados siete días.
En total, en las seis regiones de la OMS se notificaron más de 12 millones de casos y algo menos de 33.000 muertes.
Hasta el 20 de marzo se notificaron más de 468 millones de casos confirmados y más de 6 millones de muertes en todo el mundo, según recogió la agencia de noticias Europa Press.
A nivel regional, el número de nuevos casos semanales aumentó en la región del Pacífico Occidental (+21%), se mantuvo estable en la región europea y disminuyó en las regiones del Mediterráneo Oriental (-41%), África (-33%), Asia Sudoriental (-23%) y las Américas (-17%).
Por países, el mayor número de nuevos casos semanales se notificó en Corea del Sur (2.817.214 nuevos casos, +34%), Vietnam (1.888.694, +13%), Alemania (1.538.666, +14%), Francia (582.344, +39%) y Australia (513.388, +161%).
El mayor número de fallecimientos semanales se registró en Rusia (3.681 nuevas muertes, +19%), Estados Unidos (3.612, -58%), Brasil (2.242, -32%), Corea del Sur (2.033, +41%) y China (1.921, -2%).
En cualquier caso, la OMS precisa que estas tendencias «deben interpretarse con cautela, ya que varios países están cambiando progresivamente sus estrategias de realización de pruebas, lo que se traduce en una disminución del número total de pruebas realizadas y, en consecuencia, del número de casos detectados».