Gustavo D´Alessandro, presidente de Sameep, en diálogo con Radio Provincia, se refirió a los ejes principales en los que se encuentran trabajando. En este sentido, mencionó “terminar el acueducto, continuar con el plan de obras previsto y el mejorar funcionamiento en cuanto a la calidad del servicio al usuario”.
Así también manifestó la intención de “trabajar desde la empresa, en forma conjunta con la ciudadanía para entender la importancia del pago, por parte del usuario y el cobro por parte de la empresa, del servicio”. “Necesitamos tener el servicio del agua en funcionamiento para que se puedan dar otros servicios públicos y sociales en condiciones en la provincia”, aseguró.
En cuanto a las pérdidas de agua, explicó que “existe una combinación de situaciones y factores que se pueden dar”, por ejemplo “una mala instalación por parte de alguna persona inexperta”. Por eso solicitó que “quienes necesiten contar con el servicio llamen a la empresa para que haga la instalación correspondiente”.
Otras de las causas que mencionó fueron las “roturas normales y habituales de materiales obsoletos que generan este tipo de pérdidas” y los actos de vandalismo, ya que existen “entre 20 y 30 denuncias, por día, por robo de medidores en el área metropolitana del Gran Resistencia”, remarcó.
Por otra parte, Dalessandro se refirió a las obras que se están llevando a cabo y manifestó que la intención es “llegar a universalizar el acceso al agua potable, que es uno de los objetivos planteados por el gobernador Capitanich, ya en el año 2007, cuando parecía una utopía”. “Hoy podemos decir que estamos acercándonos a una realidad, porque vamos a poder contar con 20 acueductos en el 2023, llegando el agua a distintos lugares de nuestra geografía provincial”, destacó.
“Obras como estas tendrían que enorgullecernos a los chaqueños pero también somos conscientes de que tenemos que mejorar desde el servicio como empresa y desde el consumo, como sociedad”, reconoció D´Alessandro.
Finalmente, en lo que respecta a la bajante del Río Paraná, explicó que “genera demora en el sistema de potabilización y su distribución”, a lo que se suman “las altas temperaturas que generan mayor demanda y la falta de lluvias”.
En este sentido, adelantó que “hasta el mes de mayo no se prevén precipitaciones que puedan cambiar esta situación, por lo que tenemos que afrontar un otoño e invierno bastantes secos”. “Tenemos que seguir redoblando los esfuerzos de suministrar el agua en los acueductos y trabajar con las comunidades para el uso racional y sustentable del mismo”, concluyó.