La papá azul se consume en diversas partes del mundo pero se cree que su origen está en América del Sur.
El color azul-morado que tiene es por su contenido en antocianinas, un pigmento vegetal natural.
Ricas en antioxidantes, se le atribuyen propiedades que ayudan a combatir diversas enfermedades, sobre todo cardiovasculares, y el deterorio de la piel.
Además es fuente de nutrientes como la vitamina C, ácido fólico, minerales, potasio, hierro y zinc, entre otros.
También presenta alto contenido en almidón, por lo que se recomienda un moderado conusmo para personas con diabetes y obesidad.
De acuerdo con su productores, tienen un sabor suave y pueden consumirse como la papa común, es decir, hervir, freír, hacer puré o asar.
En Argentina se produce en la provincia de Jujuy, más precisamente a los 3689 metros sobre el nivel del mar de Cieneguillas.