Previo a la detención, los oficiales reportaron que se llevó adelante un allanamiento en un edificio en calle Yapeyú y Las Tuscas, donde funcionaría “el templo” del denunciado. Allí, detallaron que se secuestraron 50 sobres de papel “donde fieles entregarían ofrendas”, 1 bolsín rojo con manga, $300, un celular y una botella con un líquido verde que, tras las pruebas de campo, se comprobó resultado positivo de marihuana.
A su vez, los oficiales indicaron que se produjo otro operativo en la vivienda del acusado, ubicada sobre el Lote 88 de la localidad, donde precisaron el secuestro de $19.800 en varios billetes, 2 bolsos “cargados con cartas manuscritas de fieles” y un cartel “de gran tamaño”.
A través del reporte policial se conoció también que el hombre habría sido acusado por pastores de la localidad, quienes habrían señalado que las personas que asisten al lugar “posterior a ello requieren asistencia, ya que quedan perturbadas espiritual y mentalmente”. Según indicaron desde la Policía, los procedimientos y la detención se dieron luego de comprobar que “no hay ninguna institución Evangélica que avale sus prácticas”.