El presidente Alberto Fernández anunciará esta tarde las nuevas restricciones que se impondrán a partir de mañana con la publicación de un nuevo DNU, con el objetivo de reducir la cantidad de casos positivos en el comienzo de la segunda ola de coronavirus.
Durante la jornada de este miércoles, el Gobierno terminará de pulir los detalles del nuevo decreto.
Tras confirmarse 20.870 casos en las últimas 24 horas, las medidas serán comunicadas a la sociedad a través de un mensaje del mandatario, que se encuentra en la Quinta de Olivos tras haber contraído coronavirus.
El DNU saldrá luego de una semana de numerosas reuniones entre funcionarios del Poder Ejecutivo Nacional, del gobierno de la Provincia de Buenos Aires y de la Ciudad de Buenos Aires y comenzará a regir a partir de las 00:00 del jueves, lo que pondrá fin al decreto anterior cuya fecha de finalización era el 9 de abril.
Como todo decreto, su cumplimiento será obligatorio para todas las jurisdicciones del país, por lo que incluso las provincias que se oponen a realizar cierres profundos, de anunciarse estos, deberán acatar las órdenes del Poder Ejecutivo.
Este fin de semana, el presidente Alberto Fernández se comunicó por separado tanto con el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, como con el gobernador Axel Kicillof debido al fuerte aumento de casos en el AMBA durante las últimas dos semanas.
Asimismo, tras esas comunicaciones, también se reunieron los respectivos jefes de Gabinete de cada jurisdicción, Felipe Miguel (CABA) y Carlos Bianco (PBA), con el jefe de Gabinete Nacional, Santiago Cafiero.
De ese encuentro también participaron los ministros de Salud de Nación, Carla Vizzotti, de Provincia, Daniel Gollán, y de la Ciudad, Fernán Quirós.
De todos modos, durante esos encuentros volvieron los cortocircuitos que habían sido moneda corriente el año pasado entre la Provincia y la Ciudad por la estrategia a llevar a cabo para restringir la circulación.
Mientras que Kicillof pretende un cierre nocturno de todas las actividades a partir de las 22 horas, en la Ciudad se oponen a dicha medida debido a las complicaciones que puede generar en distintas actividades, sobre todo del rubro gastronómico, que ya fue ampliamente golpeado durante el año pasado.
El decreto contemplará un cierre de actividades por la noche, pero éste podría comenzar a la medianoche para permitir que los negocios gastronómicos -uno de los sectores más afectados por la pandemia- pueda continuar trabajando el mayor tiempo posible.