Dos referentes del gobierno venezolano salieron al cruce del gobierno argentino tras el giro en la política exterior y la condena por la violación de derechos humanos en Venezuela ante Naciones Unidas.
Uno de ellos, el constituyente del Partido Socialista Unido de Venezuela, Mario Silva, dijo que el presidente Alberto Fernández «engañó a Cristina, a Néstor (Kirchner) y a todo el mundo». En tanto, el canciller del régimen de Nicolás Maduro, Jorge Arreaza, difundió en Twitter varios mensajes críticos por el giro en la política exterior de la Argentina.
“Fernández ha engañado al pueblo argentino, engañó a Cristina, engañó a Néstor, engañó a todo el mundo (…). Va y se arrodilla nada más y nada menos con quienes hicieron esa resolución en contra de Venezuela, que es el ‘Cartel de Lima’, porque es un cartel, en donde están otros países, todos países arrodillados al imperialismo norteamericano”, disparó Silva la noche del martes en su programa en el canal del Estado, VTV.
Silva, uno de los referentes comunicacionales del chavismo, afirmó que el mandatario argentino sucumbió ante presiones por la negociación de la deuda con el FMI y lo acusó de ser “ambivalente y ambiguo”.
Unas horas del ataque del constituyente, el canciller Arreaza había compartido varios mensajes en su cuenta de Twitter que cuestionaban la votación de la Argentina en la ONU.
“Lamentablemente la Cancillería Argentina votó junto con Bolsonaro y Piñera la condena a Venezuela en la ONU. Pasamos de la doctrina Drago a la doctrina de Felipe Solá de alineamiento con EE.UU. Los problemas de Venezuela no se resuelven con bloqueos ni condenas. Muy grave y preocupante”, decía uno de los mensajes retuiteados por Arreaza.
El funcionario chavista también retuiteó un video del politólogo argentino Atilio Borón en el que señalaba: «Grave retroceso de la política exterior argentina al asociar a nuestro país a la ofensiva de Estados Unidos contra el pueblo venezolano. Cancillería dice estar contra la intervención pero vota con su instrumento: el Grupo de Lima”.
El martes, luego de una serie de vaivenes y diferencias dentro del propio oficialismo, el Gobierno votó finalmente la resolución del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que condenó las violaciones a los derechos humanos que se cometen en Venezuela, y que fueron expuestas a mediados de año y ratificadas recientemente por la Alta Comisionada en estos asuntos, Michelle Bachelet.
Esta resolución, la número 45, extiende además el mandato de la misión de expertos de la ONU que investiga crímenes de lesa humanidad por parte del régimen de Maduro.
El giro en la postura oficial generó grietas dentro del oficialismo: este miércoles, por ejemplo, Alicia Castro renunció a ser embajadora en Rusia.