El domingo, alrededor de las 23:30, en el barrio San José Obrero de la capital correntina, una familia que se encontraba cenando en la vereda de su casa fue embestida por una camioneta Ford Ranger color roja.
Producto de esta colisión resultaron lesionados en forma leve el propietario de la vivienda, debiendo ser asistido por personal del 107 y luego conducido al Hospital Escuela.
También un niño de 4 años, que estando en regazos de su madre, salió despedido un par de metros sobre la cinta asfáltica no revistiendo gravedad su caída.
El conductor del rodado intentó dar marcha atrás para huir del lugar, pero fue demorado por vecinos y familiares de los lesionados. Le sacaron las llaves, y recurrió a las copias que tenía en el interior de la camioneta.
Al advertir esta maniobra los mismos allí presentes forcejearon con el conductor logrando interrumpir su cometido.
El test de alcoholemia marcó 2,10%, cuadruplicando el nivel permitido de 0,50. Según lo observado por los vecinos el conductor «no podía estar de pie».