Renaper: investigan a ocho empleados por la filtración de datos, pero el Gobierno desmiente un hackeo
El Registro Nacional de las Personas (Renaper) formalizó ayer una denuncia penal ante el Juzgado en lo Criminal y Correccional Federal N° 11 Secretaria N° 22 tras detectar que, mediante el uso de claves otorgadas a organismos públicos, en este caso el Ministerio de Salud, se filtraron imágenes como perteneciente a trámites personales realizados en el Renaper. Desde el organismo dependiente del Ministerio del Interior se confirmó que se trató de un uso indebido de usuario o robo de la clave del mismo, y que la base de datos no sufrió vulneración o filtración alguna de datos.
El sábado 9 de octubre el Renaper tomó conocimiento de que un usuario de Twitter identificado con el nombre de @aniballeaks -cuenta que fue denunciada y que actualmente se encuentra suspendida- había publicado en dicha red social las imágenes de 44 individuos, entre los cuales se encontraban funcionarios y personajes públicos de conocimiento en general.
Confirmando lo sucedido, el equipo de seguridad informática del Renaper realizó una consulta sobre las 44 personas involucradas a fin de relevar los últimos consumos realizados mediante el uso del Sistema de Identidad Digital (SID) sobre dichos perfiles, detectando que 19 imágenes habían sido consultadas en el exacto momento en que eran publicadas en la red social Twitter desde una conexión autorizada de VPN (Virtual Private Network) entre el Renaper y el Ministerio de Salud de la Nación, y todas las imágenes habían sido consultadas recientemente desde esa misma conexión.
Dicha conexión habría realizado varias consultas individuales a las bases de datos del Renaper entre las 15:01 y las 15:55 mediante el servicio de validación de datos del SID el cual, una vez invocados el DNI y sexo de la persona, devuelve a la persona que consulta todos los datos impresos en el Documento Nacional de Identidad, incluyendo imagen y otros datos personales, los cuales luego fueron subidos inmediatamente a la red social Twitter, sin el consentimiento del titular de los mismos.
Luego de este análisis preliminar, confirmaron los especialistas, se descartó de plano un ingreso no autorizado a los sistemas o una filtración masiva de datos del organismo.