
El proceso de privatización incluirá siete concesiones diferenciadas, mientras las tierras y las vías seguirán siendo propiedad del Estado.
La administración de Javier Milei confirmó la primera privatización ferroviaria desde su asunción. Se trata de la empresa estatal Belgrano Cargas y Logística S.A., un actor clave en el transporte de cargas en Argentina. El vocero presidencial Manuel Adorni declaró en una rueda de prensa: «Producto de la ley bases, se procederá a privatizar la empresa estatal Belgrano Cargas y Logística, en lo que será la primera privatización de una empresa ferroviaria desde el 10 de diciembre pasado». Esta medida marca un cambio en la gestión del transporte ferroviario de cargas del país.
Adorni justificó la decisión explicando la situación financiera y operativa de la empresa estatal. Según los datos del gobierno, durante 2023 el Estado destinó 112 millones de dólares para el mantenimiento de Belgrano Cargas. «Ese dinero salió de todos los argentinos», afirmó el funcionario, destacando el escaso progreso logrado en los últimos años. Además, Adorni subrayó que «la distancia media transportada hoy es de 500 kilómetros, exactamente la misma que hace 50 años», lo que según él demuestra una falta de desarrollo en el sistema ferroviario.
El funcionario también remarcó que la capacidad de transporte de Belgrano Cargas no ha mejorado en los últimos años. «El límite que puede transportar el Belgrano Cargas se mantiene congelado desde el año 2009», explicó Adorni. Asimismo, criticó el manejo político de las últimas décadas: «Por desgracia, en los últimos 20 años la política nos ha acostumbrado solo a buenas intenciones, pero sin buenos resultados o con resultados que han generado mucho daño a los argentinos».
Diego Chaer, titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, también participó en la conferencia de prensa, detallando los pasos a seguir en el proceso de privatización. «Iniciamos hoy el proceso de la privatización de Belgrano Cargas», informó Chaer. El plan incluye siete concesiones diferenciadas: una para las vías, dos para locomotoras, dos para vagones y dos para los talleres. Aclaró, sin embargo, que las tierras y las vías continuarán siendo propiedad del Estado nacional.
Este anuncio es un paso más en la política económica de Javier Milei, que busca reducir el tamaño del Estado y promover una mayor participación del sector privado en áreas que, hasta ahora, han estado bajo control público. La privatización de Belgrano Cargas será un caso testigo para evaluar la efectividad de esta estrategia en uno de los sectores clave para la logística y el comercio en Argentina.